Estoy leyendo “un regalo para toda la
vida”, libro de Carlos González, que recomiendo a todas las mamás
y futuras.
Iba a hacer un post de recomendaciones
a modo resumen que he leído y considero muy importantes y que a mi
me han servido, pero lo haré en otro post, cuando tenga más
avanzado el libro.
Hago esta introducción porque no
quería dejar de comentarlo y porqué también habla de pasada sobre
el cuidado del cordón que ojalá hubiera leído antes!
Pues bien, al lio, ¡que casi dura más
la introducción que el post!
El cuidado del cordón es un tema que
tras nacer el bebé puede inquietarnos más o menos, aunque en
principio no es muy complicado ni muy preocupante, salvo cuando ves
que el cordón sigue y sigue y sigue y parece que nunca cae!
Al superbebé, tardó en caerle casi
dos meses, y de hecho ni le cayó de forma natural...Fuimos a
urgencias porque lo tenía rojito y se lo quemaron con nitrato de
cromo (si no recuerdo mal) y al día siguiente le cayó.
Las recomendaciones son varias:
limpiarlo con alcohol, limpiarlo con cristalmina (lo que hicimos
nosotros), limpiarlo con agua y jabón, no bañar al bebé en remojo,
etc etc...
Nosotros ni teníamos a superbebé en
remojo ni lo bañábamos todos los días, pero lo limpiábamos con
cristalmina, al principio varias veces al día, después alguna vez
al día.
El superbebé no tuvo ningún problema
de infección, aunque como digo, finalmente le cayó porque se lo
quemaron.
Por si a algun@s
os pasa, contaros, se le quedó la piel de alrededor del ombligo
un poquito
manchada de color marrón.
Como siempre, ante la duda, me fui al
pediatra otra vez, y me dijo que eso era piel quemada, pero que no me
preocupara porque era a nivel muy muy superficial.
De hecho a la semana o 10 días había
desaparecido la mancha y no fue nada grave.
Pero eso no quita mi preocupación
durante unos días por la piel “quemada”....
En este libro que os digo, que para mí
viene siendo como un manual de instrucciones, el autor comenta
también varias recomendaciones, aunque parece que la que más
defiende es la de simplemente agua y jabón.
Después de mi experiencia y leer esto,
yo creo que para futuro, lo que haría sería no bañar mucho al bebé
y no insistir mucho con la limpieza del ombligo. Por supuesto
mantenérselo limpio y vigilado pero no insistiendo con productos
(como alochol o cristalmina) que son buenos para evitar
infecciones pero que impiden que se seque más rápido.
Ni limpiarlo continuamente ni dejarlo
abandonado, creo que en el término medio está lo correcto.
¿Cómo les cayó el cordón a vuestros
bebés?
¡Muy bonito el blog!
ResponderEliminarPásate por el mío que hay un regalo para ti.
;)
Hola Lucía!!!
ResponderEliminarH visto que me has nominado al premio Liebster!!!! Q contenta estoy!!
Muchísimas gracias !!!
Estoy leyendo tu blog y me gusta mucho, veo que tenemos muchas ideas comunes. un abrazo
Muchísimas gracias
heroinas , es lo k sois,por todo lo k pasais,y sois felices. tb es k es la maternidad algo k hos da fuerza
ResponderEliminarMuchas gracias! Se agradece mucho que nos hagáis estos comentarios! Un abrazo...por cierto, ¿tienes también un blog?
ResponderEliminarno , no tengo
ResponderEliminarMuy interessante conocer otras experiencias que nos ayudan y nos hacen sentir más segura. Gràcias supermamá por compartir
ResponderEliminarMuchas gracias a ti por estar ahí!
ResponderEliminar